YOLANDA DíAZ APURA SUS VACACIONES SOLA EN GALICIA: ASí HA SIDO SU PRIMER VERANO TRAS EL DIVORCIO

Últimos días de vacaciones para la ministra de Trabajo, que ha vivido un agosto particularmente solitario después de que el pasado mes de febrero se anunciara su divorcio de Andrés Meizoso, su marido desde hacía 20 años y padre de su única hija, Carmela. Yolanda Díaz ha visitado su tierra natal, Vigo, donde ha cambiado el caluroso ajetreo de la capital por la maravillosa costa gallega. Vestida con bikini verde botella con apliques dorados, la política de Sumar ha presumido de un físico muy esbelto a sus 53 años y se ha bronceado con la única compañía de su teléfono móvil y un buen libro.

La ministra llegó a la playa bien preparada con un capazo, una cómoda silla y una buena reserva de protector solar, que se aplicaba cada poco tiempo, según Ok Diario. Con gorra y pareo rojo, pasó desapercibida para el resto de turistas, que no parecieron reconocerla, y disfrutó de una jornada tranquila y solitaria que dedicó a mensajearse a través de su terminal móvil y a leer la obra 'La broma infinita', de David Foster.

Yolanda se refrescó en varias ocasiones a lo largo del día y se bañó en el frío Atlántico. Eso sí, sin mojarse el pelo, que llevaba recogido en un moño informal y sencillo. Solo abandonó la arena para comer algo en un chiringuito cercano. Al terminar la jornada, disfrutó del precioso atardecer y abandonó la zona tal y como había llegado: conduciendo su propio coche.

Su primer verano divorciada

No han sido unos meses fáciles para la ministra tras su divorcio de Andrés Meizoso. Llevaban casados 20 años y tienen una hija en común, Carmela, de 12 años, que ahora vive con su madre en Madrid. La noticia, inesperada para la prensa, no sorprendió a su círculo más cercano, pues aseguraron que la crisis y el distanciamiento entre ellos venía de lejos. "Díaz llevaba alejada de su marido al menos un año y haciendo vida social al margen de Meizoso. Ya se habían repartido previamente las responsabilidades de la crianza de su hija, Carmela", dijeron en La Razón.

Díaz conoció a Meizoso mientras estudiaba Derecho a finales de los años 90. Se casaron el 15 de noviembre de 2004, hace casi 20 años, en el centro cultural Torrente Ballester de Ferrol, en una ceremonia civil. Para su boda la coruñesa lució un vestido rojo y su marido un traje en color crema.

Delineante de profesión, el exmarido de la política gallega continuó viviendo en Ferrol cuando Yolanda Díaz se trasladó a la capital por motivos profesionales, cuando fue nombrada ministra. Pero la intensidad del cargo obligó a Yolanda Díaz a reducir la frecuencia de sus viajes a Galicia y su marido acabó por trasladarse a Madrid poniendo la familia en el top de sus prioridades. A finales de 2021, Meizoso consiguió un empleo como delineante en Madrid y cambiaron a su hija de colegio, pero él volvió a su tierra tras la separación. Los dos comparten una gran amistad y una hipoteca de más de cien mil euros; y entre sus bienes aparecen una vivienda, un despacho de abogados y dos coches.

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